
Se llegó a un acuerdo para la primera fase del plan de paz, que incluye un alto el fuego, la retirada israelí de Gaza y un intercambio de rehenes por prisioneros.
En un nuevo capítulo de la relación tensa entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina, la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva, volvió a cargar contra las políticas económicas locales al exigir recortes "imprescindibles" en salarios y pensiones.
Internacionales09/10/2025En un nuevo capítulo de la relación tensa entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina, la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva, volvió a cargar contra las políticas económicas locales al exigir recortes "imprescindibles" en salarios y pensiones. Durante una conferencia virtual organizada por el Banco Mundial, Georgieva subrayó la necesidad de que "la gente confíe y acompañe" un ajuste fiscal que incluya reducciones de entre el 40% y el 50% en estos rubros, presentándolo como "muy importante para la Argentina".
Las declaraciones de Georgieva llegan en un momento crítico para el gobierno de Javier Milei, que enfrenta crecientes presiones internas por la inflación galopante –que superó el 250% anual en septiembre– y el descontento social derivado de las reformas estructurales implementadas desde su asunción en 2023. "Necesitamos que la gente confíe y acompañe: hay que reducir entre el 40% y el 50% los salarios y las pensiones. Eso es muy importante para la Argentina", reiteró la ejecutiva del FMI, argumentando que tales medidas son clave para "restaurar la sostenibilidad fiscal" y atraer inversores extranjeros.
Esta no es la primera vez que Georgieva interviene en el debate argentino. En julio pasado, el FMI aprobó un desembolso de 4.700 millones de dólares como parte del acuerdo stand-by renegociado, condicionado a metas de superávit primario y contención del gasto público. Sin embargo, críticos locales, incluyendo sindicatos y opositores políticos, denuncian que estas exigencias equivalen a "otro préstamo para sostener un proyecto político", en alusión al endeudamiento crónico que Argentina arrastra desde la crisis de 2001.
El líder de la CGT, Héctor Daer, reaccionó con dureza: "Georgieva habla desde su burbuja en Washington, ignorando que millones de argentinos ya no llegan a fin de mes. Reducir pensiones en un 50% es una receta para la revuelta social, no para la recuperación". Por su parte, el ministro de Economía, Luis Caputo, defendió el alineamiento con el FMI, afirmando que "sin estos ajustes, el país colapsaría en hiperinflación". Datos del INDEC revelan que el salario real ha caído un 35% desde fines de 2023, mientras las jubilaciones mínimas apenas cubren el 60% de la canasta básica.
En el Congreso, el proyecto de ley de financiamiento para 2026 –que incluye recortes en subsidios y transferencias a provincias– enfrenta resistencia de bloques provinciales, quienes lo tildan de "entrega al FMI". Analistas como el economista José Luis Espert advierten que, sin un plan de ingresos alternativo, el ajuste podría profundizar la recesión, con un PIB proyectado a contraerse un 2,5% este año según el Banco Central.
Georgieva, por su lado, elogió los "avances" de Milei en desregulación y privatizaciones, pero dejó la puerta abierta a revisiones en el acuerdo si no se cumplen las metas. "La confianza es mutua: Argentina debe demostrar compromiso, y el mundo responderá con apoyo", concluyó. Mientras tanto, en las calles de Buenos Aires, protestas espontáneas de jubilados y trabajadores ya comienzan a vislumbrar el costo humano de esta "confianza" exigida desde el exterior.
Se llegó a un acuerdo para la primera fase del plan de paz, que incluye un alto el fuego, la retirada israelí de Gaza y un intercambio de rehenes por prisioneros.
Las calles de Estados Unidos volvieron a llenarse de gente, esta vez no para celebrar nada, sino para resistir el avance represivo de un gobierno que decidió perseguir a los inmigrantes como si fueran enemigos internos.
Unas 400 personas que formaban parte de la flotilla que intentaba llevar ayuda humanitaria a Franja de Gaza fueron detenidas por las fuerzas israelíes.
La operación naval israelí contra una flotilla humanitaria desató una ola de repudios de gobiernos y organizaciones. Desde Turquía hasta Sudáfrica, pasando por América Latina y Europa, se cuestiona la legalidad de la acción y se exige la liberación inmediata de los activistas.
El embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, liderará las sesiones del máximo órgano de decisión de la organización, con un enfoque en la eficiencia procedimental y el fortalecimiento de lazos con naciones africanas.
En un tenso enfrentamiento en aguas internacionales del Mediterráneo, las fuerzas israelíes abordaron y detuvieron la Flotilla Global Sumud, que transportaba ayuda humanitaria a la franja de Gaza. Entre los detenidos figuran figuras como Greta Thunberg y la eurodiputada Rima Hassan, en un acto que ha desatado condenas internacionales por violar el derecho marítimo.
La detención de la Flotilla Global Sumud por fuerzas israelíes ha provocado una ola de condenas y medidas diplomáticas drásticas en varios países, con Colombia ordenando la salida inmediata de los últimos diplomáticos israelíes restantes, en un contexto de tensiones ya rotas desde 2024 por la guerra en Gaza.
La iniciativa, impulsada por la administración de Donald Trump, ha sido calificada de "rescate político a un aliado ideológico" y enfrenta ahora una creciente resistencia que podría bloquear su aprobación.
Mientras se anuncia el fin de la obra pública, el Gobierno financiará con fondos estatales la primera ruta privatizada del país.
Se llegó a un acuerdo para la primera fase del plan de paz, que incluye un alto el fuego, la retirada israelí de Gaza y un intercambio de rehenes por prisioneros.
Según adelantó el paleontólogo que lidera la expedición en Río Negro, los huevos se encuentran en perfectas condiciones de preservación. Y sospechan que, al no haber eclosionado, podría contener un embrión fosilizado.
En un nuevo capítulo de la relación tensa entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina, la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva, volvió a cargar contra las políticas económicas locales al exigir recortes "imprescindibles" en salarios y pensiones.
El hecho, que ha generado repercusiones internas en el organismo, expone posibles irregularidades en el uso de recursos públicos para actividades partidarias.